A los 62 años el humorista, dibujante y escritor Roberto Fontanarrosa murió producto de una insuficiencia respiratoria, causada por la enfermedad neurológica degenerativa que lo acosaba desde el 2004.
El Negro, amante del fútbol, de Central y de su ciudad natal, Rosario, creó entre otros a los personajes Inodoro Pereyra y Boggie, el aceitoso, y escribió cientos de chistes y cuentos, siempre usando un lenguaje simple y sin complicaciones para cualquier lector. Quizás eso fue lo que más lo acerco a la gente, que sus textos eran de fácil entendimiento para las personas y, muchas, se identifican con sus palabras.
Supo sacar sonrisas en cualquier ámbito y en sus cuentos relataba historias fantásticas con personajes de la vida cotidiana.
No se fue un periodista ni un humorista, se fue un gran escritor que supo hacerse amigo hasta de los que no conocía.
El Negro, amante del fútbol, de Central y de su ciudad natal, Rosario, creó entre otros a los personajes Inodoro Pereyra y Boggie, el aceitoso, y escribió cientos de chistes y cuentos, siempre usando un lenguaje simple y sin complicaciones para cualquier lector. Quizás eso fue lo que más lo acerco a la gente, que sus textos eran de fácil entendimiento para las personas y, muchas, se identifican con sus palabras.
Supo sacar sonrisas en cualquier ámbito y en sus cuentos relataba historias fantásticas con personajes de la vida cotidiana.
No se fue un periodista ni un humorista, se fue un gran escritor que supo hacerse amigo hasta de los que no conocía.
Ahora, Negro, hacé reir a los ángeles.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario